Honoré retrata con una fotografía preciosa la relación de dos hombres en Francia en la década de los 90’s.
El Síndrome de Inmunodeficiencia
adquirida (SIDA) fue conocido en la
década de los 80’s y 90’s por la crisis sanitaria que, en conjunto con la
ignorancia y la falta de tratamientos deficientes, ocasionó miles de muertes.
Desde entonces es un tema recurrente en las películas y series con personajes
homosexuales, se han hecho tantos productos del tema que casi podríamos
considerarlo un subgénero, claro que ha habido de todo, algunas producciones
han tratado el tema de manera superficial o de manera morbosa y algunas otras
han profundizado en él.
Vivir deprisa, amar despacio de Christophe Honoré realiza un retrato un tanto diferente, pues la
vida de Jaques (Pierre Deladonchamps)
—el protagonista— no parece girar en torno a su enfermedad, a pesar de mostrar
el deterioro progresivo que tiene a lo largo de la película. Y es que el
director francés le imprimió al filme una nostalgia que se aleja del dramatismo
usual con el que se suele tratar el tema, además de regalarnos un hermoso y
sutil romance.
Jaques es un escritor de treinta y
cinco años que vive con cierta apatía. Resignado a morir, comparte su vida con
su hijo Louis (Tristan Farge) y su
mejor amigo Mathieu (Denis Podalydes).
Un día, mientras se encuentra de viaje por trabajo, conoce a Arthur (Vincent Lacoste), un joven extrovertido
que a sus veintidós años está explorando su sexualidad. Después de un encuentro
íntimo, se enamoran mientras comparten llamadas y correos, para uno será su
primer amor y para el otro el último.
El director francés hace una
película con una calidad visual encantadora, los encuadres bellísimos y de un
azul melancólico resultan tan conmovedores como la increíble química que
Delandonchamps y Lacoste tienen, todo el tiempo, en pantalla. La naturaleza y
el carisma en sus interpretaciones fueron lo mejor de la película.
Y sí eres amante de las referencias
cinematográficas y literarias, te reto a contar cuántas metió Honoré en la
cinta, ya que muchas escenas y diálogos vienen cargadas con homenajes o
menciones a cineastas y poetas que han influido en el trabajo del director.
He de decir que la primera vez que
vi el largometraje lo sentí algo largo y lento, pero la segunda vuelta fue
necesaria porque deseaba ver más de estos personajes y de esta historia. Además
de tratar la amistad, la vida, la mortalidad y la intimidad de una manera tan
inteligente y delicada, el cineasta logra que Vivir deprisa, amar despacio cuente
con la magia y la cotidianidad características de una historia de amor que será
difícil de olvidar.
En Rotten tomatoes fue aprobada por parte de los críticos con un 82% y
con un 62% por parte de la audiencia.
Dándole 3.5 estrellas de 5, los invito a ver esta linda historia de amor y perderse en el carisma de Vincent Lacoste.
Vivir Deprisa, Amar Despacio
Plaire, aimer et courir vite
Francia, 2018
Dir. Christophe Honoré
Guion: Christophe Honoré
Reparto: Vincent Lacoste, Pierre Deladoncham y Denis Podalydes.
Duración: 2h 2m
'VIVIR DEPRISA, AMAR DESPACIO': UN ROMANCE DIFÍCIL DE OLVIDAR
Reviewed by Marco Pérez
on
agosto 13, 2019
Rating:
Reviewed by Marco Pérez
on
agosto 13, 2019
Rating:

Bet on sports with VLTOPBet m88 m88 1xbet 1xbet 우리카지노 마틴 우리카지노 마틴 169Which horse racing betting strategies should I follow? - thauberbet.com
ResponderBorrar